Arizona Capitulo II

Una lasaña vegetal y un par de cafés con leche en polvo más tarde aterrizamos en los -6 grados nevados de Chicago. Cómo no, la mitad del pasaje no puede esperar a que abran la puerta del avión para encender sus teléfonos móviles (es que tod@s son gente muy importante que deben resolver problemas de estado).

Control de pasaporte. Sonrío al agente para indicarle que no tengo intención de matar a su presidente, tampoco llevo antrax en las bragas ni porto ninguna insignia comunista en el sostén. Te pide que pongas primero un pulgar, luego el otro, luego el índice, (¡venga hombre! ¡Saca el "Enredos" y así jugamos todos!) una muestra de saliva para los de CSI (¿hay versión Chicago?) y por fin el sellito de entrada. Ah! no, espera que vuelve a mirarlo y me dice ¿qué va a hacer una española en Arizona? Y el lado macarra de mi mente  piensa: traficar con tortillas de patata; Pero la rubia "Yin" pone cara de buena y dice emocionada: visitar a una buena amiga. La caída de ojos funciona, por fin me devuelve el pasaporte y entre dientes me da la bienvenida a los Estados unidos de América.

Me quedan un par de pitis en la mochila y pienso: ¡venga, vamos a ver como se combina la nicotina, los 6 bajo cero y el riesgo de ser detenida por fumar en un lugar inapropiado!  Sería una buena anécdota para contar: mi último cigarro me lo fumé de pie, a 6 grados bajo cero, en la puerta sur de la terminal 5 del aeropuerto de Chicago, antes de ser arrestada.

Mi personal (e intransferible) sensación térmica es que una vez estas bajo cero, te da lo mismo 4 que 6 o que doce...la piel sufre un profundo efecto lifting y el aire te parece puro aunque estés al lado de un distribuidor de queroseno.

Con tres caladas he tenido suficiente de nobel y nieve así que voy en busca del tren que me lleve a la terminal 3 para embarcar hacia Phoenix. Al llegar me espera otra sorpresa...¿adivinan qué? ¡Otro animado control de seguridad! Esta vez es algo más morboso pues el scan es de esos que las agentes pueden ver tu cuerpo serrano. Puedes negarte, pero claro, tú ve y pon pegas y antes de decir "mu" ya tienes al F.B.I. investigándote. Así que adopto la postura más sexy posible y dejo que las nenas se alegren la vista. Creo que una me ha guiñado el ojo cuando me agachaba para atarme las botas...

¡Prueba superada! camino de la puerta K9 para embarcar a Phoenix... 

Arizona cada vez está más cerca...